lunes, 29 de noviembre de 2010

El fumar se va a acabar

Sí, se va a acabar en los sitios donde es una autentica molestia, es decir, en todos los lugares cerrados, sean de ocio o no.

¡POR FIN! ¡ALELUYA!

Ya sé que me voy a poner en contra de ese 30% de población fumadora, pero es que ya me tienen un poco hasta los teleféricos.

Durante años he tenido que aguantar fumadores, primero a mi padre, al que años después se le sumó mi hermana, posteriormente compañeros de clase, compañeros de trabajo…

Cuando volvía a casa me olían a tabaco hasta los calzoncillos, de hecho, deje de usar abrigos para no tener que colgarlos en la oficina. Era realmente asqueroso, pero supongo que esto seria realmente asqueroso para los fumadores también, la ropa les olería a ellos igual de mal que a mí, no lo entiendo.

Afortunadamente hace unos años, alguien tuvo la feliz idea de prohibir por ley fumar en los centros de trabajo. Un ministro de sanidad del PP al que nunca le estaré lo suficientemente agradecido. Se acabo al regresar a casa, echar la ropa a lavar de forma inmediata e ingresar en la ducha de forma instantánea. Incluso ahora, los falsos techos de las oficinas están blancos durante años. Eso sí, se ha creado la patética imagen de los grupos de gente fumando a las puertas de los centros de trabajo. Recuerdo las jaulas de cristal que había en el aeropuerto de Barajas para los fumadores, daban ganas de echarles cacahuetes.

Cuando por fin tuvimos una casa para nosotros solitos, la primera norma que se estableció fue la absoluta prohibición de fumar, de forma radical, esto lo hicimos mucho antes de que se estableciera la ley, por lo tanto, la puerta del portal de nuestra casa fue pionera en los grupillos de fumadores pasando frio, no tuvimos piedad con nadie, ni familiares, ni amigos, ni fontaneros… el que sacaba un cigarrillo en casa era amablemente invitado a no fumar o fumar fuera. Incluso en una inspección de mi equipo de radioaficionado por la Guardia Civil (El rey iba a pasar por la puerta de nuestra casa y yo tenía antenas sospechosas en el tejado), pues eso, la autoridad competente sacó, supongo que de forma inconsciente un pitillo, y le dije que registrara lo que quisiera pero que no se le ocurriera encenderlo.

Lo malo después de la prohibición de fumar en los centros de trabajo, era que la ley se había quedado un poco ambigua para los centros de ocio, lo que hizo que yo no fuera muy asiduo de bares y mucho menos si estos son de copas, que llamara a los restaurantes antes de reservar para ver si dejaban fumar o no. Pero afortunadamente esto también ha llegado a su fin.

Señores dueños de bares, restaurantes y demás antros…

Llevo un año escuchándoles despotricar contra esta ley, solo quiero decirles que tranquilos… posiblemente pierdan parte de su clientela, pero yo estoy esperando al día 2 de enero para poder salir a cenar, a tomarme un zumo de piña en un bar de copas (es que yo no bebo) a entrar a tomarme un pincho de tortilla una mañana en cualquier bar… Por lo tanto, simplemente cambiaran su clientela por otra, y punto. Posiblemente salgamos a cenar a más sitios y no solo al Foster Hollywood, por la razón de que ahí no se fuma.

Los fumadores debéis de comprender de que sois muy libres de crearos un cáncer de pulmón cuando queráis, esto no es fácil de decir para mi, ya he perdido amigos por causa del tabaco, pero dejarnos a los demás respirar en paz, ya que no lo habéis hecho por las buenas ahora lo haréis por… ley.

Diego.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Condenado estoy, y a mucha honra.

Hola amado pueblo:

Las tantas de la noche, es lo malo que tiene la inspiración, que llega cuando llega. Pero yo no creo en la inspiración, por lo tanto, simplemente estoy escribiendo ahora por que ha tocado y así lo había previsto, eso sí, con una interesante música de fondo, jazz tranquilo y relajante, ideal para esta hora.

Hace un par de días, mientras buscaba un tema para el blog, me incitaron a escribir sobre la visita del Papa, pero como no estoy por la labor de ir solo al infierno diré que la incitadora es mi amiga Cristina  L. Ella irá al infierno por instigadora y yo por hereje y chivato.

Bueno, el Papa ha venido, pues a mí me parece muy bien, no tengo nada en contra, ni he salido a manifestarme, ni he dado gritos y el que quiera ir a los actos o a las misas pues que vaya. ¿Y lo que ha costado? Pues tampoco es que me preocupe, puestos a tirar el dinero de todos en actividades lúdicas diversas como inauguraciones, clausuras, saraos y demás zarandajas, consideraré esto una historia como tantas otras y ya está.

Pero lo que no voy a tolerar de “susan” (abreviatura de Su santidad) es que piense que somos un país de estúpidos ignorantes miedosos. Y como la única opción que tengo de “no tolerar” es escribir, pues voy a hacerlo.

A susan no se le ocurrió otra cosa que decir en el avión que le traía a nuestra amada patria que estamos viviendo un anticlericarismo igual al de la década de los 30 del pasado siglo.

Susan, quiero pensar que está usted muy mal asesorado, ya que me cuesta pensar de usted lo que realmente pienso.

Evidentemente la empresa que usted dirige ha ido perdiendo poder y cuota de mercado a medida que la gente tenía la capacidad y sobre todo la libertad de pensar, confiemos en que a su competencia, el Islam le pasé lo mismo.

Esto que estoy escribiendo en estos momentos y que desafortunadamente usted no leerá, no habría sido posible si el departamento de su empresa que estaba bajo su mando antes de dirigir todo el cotarro siguiese en vigor. No hay que olvidar que Congregación para la Doctrina de la Fe, es el nombre amable de la Santa Inquisición.

Mal vamos susan, si la capacidad y libertad que tengo para escribir esto es considerada una amenaza contra su emporio, su pérdida de influencia en la sociedad solo es atribuible a la nula capacidad de su negocio de ponerse mínimamente al día. Sirva como ejemplo que su empresa retiró la aportación que hacía a Unicef utilizando como argumento que defendían el uso del preservativo en los países donde los niños según nacen se mueren de hambre. Mal estamos gestionando el negocio susan. Afortunadamente, exceptuando a los más radicales a usted ya no le hacen caso ni los suyos, si, creen, pero a su manera, sin dogmas y sobre todo sin usarle a usted y a sus sicarios de intermediarios.

El mismo derecho que ustedes tenemos los agnósticos a proclamar nuestro ideal, claro, que eso para ustedes forma parte del principio del fin del mundo, el final de la sociedad, etc, cuando simplemente lo único que puede ser y que lamentablemente no será es el “fin de su mundo” y sobre todo de su negocio.

Tranquilo susan, no voy a salir a manifestarme en su contra, ni a quemar iglesias ni a perseguir curas. Eso sí, cuando consideré que dice una “infalible estupidez” la contestaré en este humilde medio.

Diego.

martes, 9 de noviembre de 2010

es que no me lo creía (junio 2008, antes de la crisis)

Queridos todos:


Hoy, mientras Rafa Nadal juega al tenis en París contra un chaval de Basilea, he decidido escribir alguna cosilla en el blog, que lo tengo muy abandonado.
El caso es que yo tenía un par de temas preparados desde hace algún tiempo, y el último me lo han chafado.
 
Me explico:
 
Desde hace algún tiempo he oído en la radio que en la tele holandesa van a poner un programa, que consiste en que un enfermo terminal, ofrece sus riñones a unos concursantes que están sometidos a diálisis, tras superar algunas pruebas y entrevistas, el enfermo terminal decidirá cuál de los concursantes se queda con los órganos en cuestión.
Yo no daba crédito a lo que estaba escuchando, y en principio no me lo creí, lo peor de todo fue que la noticia fue emitida por mas emisoras de radio (yo apenas veo la tele) y parecía que la cosa iba en serio.
 
Ya sé que la tele holandesa inventó el Gran Hermano (suprema estupidez televisiva) pero no podía creer que los holandeses llegaran a esto, me parecía el colmo de las monstruosidades mediáticas. ¿Es posible que la legislación holandesa permita esto? En España sería imposible. ¿Qué es lo próximo? ¿Secuestramos un niño en el tercer mundo y subastamos sus órganos en una gala benéfica? ¿Ya han llegado los holandeses a esto? ¿Nos falta mucho a nosotros? Por favor, que paren el mundo que yo me bajo, me niego a formar parte de esta humanidad.
 
Ya estaba a punto de cerrar mi cuenta en el ING Nationale-Nederlanden (mi única opción de boicot a Holanda) cuando me entero de que todo había sido una farsa. Sí, una farsa pero...
La farsa se desveló al final del programa, mientras este tuvo la máxima audiencia, una audiencia de... mejor no lo califico por dos razones, en Holanda alguien se enfadará conmigo ¿verdad? y posiblemente en España hubiera pasado lo mismo.
 
Resultó ser un programa para motivar a los holandeses a que donen sus órganos, jó con los holandeses, resulta que tienen uno de los niveles de donación de órganos más bajos del mundo, luego me enteré de que en el resto de Europa la cosa no es para tirar cohetes.
 
Entonces... por fin... lo hemos logrado... Nuestro crecimiento económico, va en aumento por encima de la media comunitaria, nuestra diplomacia tiene cada vez más peso en el mundo, nuestro nivel de vida aumenta de forma constante... pero en una cosa somos los campeones del mundo mundial, la primera potencia, a mucha diferencia de los demás países de mundo... Somos los primeros en donaciones y trasplantes en el mundo, a mucha diferencia del segundo. Solo un 15% de las peticiones de órganos a los familiares de un fallecido son rechazadas ¿serán holandeses?
 
Está claro que somos un pueblo al que nos gusta vivir la vida, que la disfrutamos especialmente, independientemente de nuestro nivel económico y social. Tal vez tengamos la generosidad de los pobres, lo que está claro es que no hemos perdido esa generosidad ni las ganas de vivir a pesar de estar convirtiéndonos en nuevos ricos.
 
Por mi parte para nada quiero mis órganos cuando me muera, de manera que le den mis corneas a alguien para que pueda ver, mis riñones a un par de dializados, mi corazón al que le haga falta y mis güevos al flan Dhul, o a las monjitas de Santa Clara para que no llueva en alguna boda católica. Ya habré vivido yo lo suficiente y me lo habré pasado lo mejor posible, que los disfrute otro.
 
¿Alguien fuera de España me dejará de hablar por esto?
 
Yo, Diego

Mi "jobi" (febrero 2008)

Tranquilos, hoy no me voy a meter con nadie.
Después de tres meses y pico de injustificada ausencia me he inspirado para escribir alguna tontería, y he decidido de forma unilateral y sin consultar a nadie escribir un poquito sobre mi “JOBI”, palabro ingles que significa afición.
 
Ñoras y Ñores, servidor es radioaficionado.
 
¿Pero qué es eso?
 
Eso es un señor o señora, al que le gusta modular ondas electromagnéticas y lanzarlas al mundo, para que otros señores o señoras situados en otros lugares que pueden ser lejanos, o no, demodulen esas ondas y vean o escuchen la información que contienen.
 
Para realizar tan magna hazaña es necesario disponer de unos cacharros adecuados a tal efecto, los cacharros se resumen en:
 
Un emisor de radio
Un receptor de radio
Y algo lo más parecido posible a una antena, a ser posible en el tejado.
 
Y ahora viene lo divertido.
 
Uno puede construirse los cacharros con mucha imaginación, paciencia y poco dinero o comprarlos con mucho dinero, y nada de paciencia e imaginación.
En la actualidad hay que reconocer que es más barato comprarse una maravilla de emisor japonés por menos dinero que lo que costaría construirse uno mismo un cacharro con muchas menos prestaciones, y en ello estamos, nos compramos los juguetes y los usamos.
Pero...
Realmente esto es una afición con truco, hay que obtener la licencia del ministerio de industria y comunicaciones previo paso por un examen, hay que documentar y justificar los cálculos de los equipos de emisión y las antenas, hay que tener un seguro por si se te cae la antena del tejado y sobre todo es una afición que requiere constancia y autodisciplina, debido a estas dos últimas causas, la radio como afición cada vez tiene menos adeptos y somos una especie en vías de extinción, como los curas, que también requieren constancia y autodisciplina.
 
A pesar de todo, y a pesar de que llevo 30 años en esto de la radio, aun me emociono cuando contestan a una de mis llamadas desde Tahilandia, cuando recibo la señal de algún misionero en alguna planicie africana, cuando escucho a las tropas españolas desde Afganistán, o simplemente cuando charlo con algún colega próximo al que sigo bombardeando a preguntas de temas radiofónicos y técnicos que no domino.
 
Y es que yo aún no he perdido mi capacidad de asombro, estoy escribiendo con un teclado ergonómico (es que yo soy así de chulo) delante de un monitor de Tv. conectado a un cacharro que a su vez está conectado a la línea de teléfono, que permitirá que este texto sea visto por quien quiera desde cualquier sitio donde exista una conexión a Internet, ¿Esto es asombroso, verdad?
Pues los radioaficionados lo hacemos más difícil todavía ¡Sin conexión telefónica!
 
Ya sé que esto no le importa a nadie, pero a mí me gusta desde que era niño, en fin... sigo asombrándome.
 
Sed buenos y asombraros un poquito de vuestro alrededor.
 
Yo Diego.

Me rindo (noviembre 2007)

Queridos todos:


Hace unos pocos días ha sido la fiesta de Todos los Santos.


¿Seguro?


Porque en contra de todos mis principios lo que se ha celebrado ha sido el Jalogüin, fiesta de importación en la cual los niños y no tan niños se visten de espectros y fantasmas, aunque alguno no lo necesite, y se van a postular por las casas.


¿Y qué es lo que tengo que hacer? Antes lo único que pedíamos era el aguinaldo y para el Domund.
Ante semejante duda consulte a un experto, a un experto joven que ya sabe en qué consiste esto.
-Si van a tu casa te preguntaran qué prefieres, truco o trato.
-¿y qué es lo que tengo que responder?
-Tú responde trato, y tienes que darles unos caramelos.
-Pues ahora no tengo caramelos, como no quieran un bocata de chorizo...
-No, mejor caramelos.
-Pues este año no me da tiempo, estaré preparado para el próximo.


El caso es que esto de dar caramelos a pequeños monstruos que llaman a mi casa podría aceptarlo, el problema es que es lo que hago cuando a la entrada de mi barrio una panda de fantasmones ya de cierta edad se dedican a tirar huevos a los coches.


-¿Y a estos que es lo que tengo que darles?


-A estos no les des nada, mejor aceleras y te vas con el coche lleno de huevos.


-Pues no le veo yo la gracia a la fiesta esta, estará patrocinada por los túneles de lavado.


Evidentemente cuando uno tiene ocho años debe ser muy divertido vestirse de monstruo o similar y salir con tus amigos a hacer lo que ven en las pelis yanquis, yo me quedaba en casa viendo al Comendador en Estudio 1, en fin... los tiempos cambian.


¿Pero qué será lo próximo? ¿Comeremos pavo el Día de Acción de Gracias? ¿Será fiesta el cuatro de julio?


Es curioso, se visten de fantasmas la fiesta de todos los santos pero no salen a tocar la pandereta en navidad ¿Me lo puede explicar alguien?


Evidentemente nos han invadido culturalmente y nos dejamos. Nos merecemos los huevazos en los coches, y eso como mal menor.


Por lo tanto,  me rindo, ya no puedo luchar yo solo contra esto, el próximo año estaré preparado con caramelos, asumiré lo de los huevazos en el coche y haré el esfuerzo de tomármelo con deportividad. Pero advierto... Al que me pida el aguinaldo en Navidad lo mandare a... vestirse de fantasma.


Yo Diego

¿Os ha pasado? octubre 2007

Queridos todos:

Ya ha pasado el verano, ya he vuelto de vacaciones, y ya vuelvo a daros la paliza.

Comenzons:

Un día de diario cualquiera de 1973.

Dieguito acaba de llegar del colegio

-Dieguito toma 10 pesetas y baja a la tienda a por patatas.

-Jo mama, ¿otra vez?

Y es que Dieguito, acaba de subir con el pan, que es vendido en la misma tienda que las patatas.

Tras un hábil desenvainado de zapatilla por parte de la mamá de Dieguito, este accede “gustosamente” a realizar el recado que le ha sido solicitado. Coge la bolsa de rafia (creo que era de rafia o algo parecido) una bolsa que ya tenía unos añitos y que fue usada durante unos cuantos años más, también coge el dinero que le da su mamá, baja los tres pisos que le separan del portal, sale a la calle, la cruza atentamente para no ser atropellado por un 600 o un 850 y se planta en la panadería-frutería-verdulería situada enfrente de su casa.

-Hola Dieguito, ¿Otra vez por aquí? ¿Qué te pongo?

-Dos kilos de patatas.

-¿Nuevas o viejas?

-¿Qué? ...esto... no sé... nuevas

Y es que esta fue una de las primeras preguntas existenciales que le hicieron a Dieguito, una pregunta a la que Dieguito no tenia respuesta y a la que respondió tomando una de las primeras decisiones de su vida sin tener todos los datos para dar la respuesta correcta.

-Dingg dongg

-Toma mamá, las patatas, me han preguntado si las querías nuevas o viejas y las he pedido nuevas.

-Muy bien Dieguito.

Uffff... menos mal, había acertado.

Desde aquel día y durante muchos años Dieguito trajo patatas nuevas a casa siempre que su mama “esgrimía” convincentes argumentos para que hiciera los recados sin protestar.

Un día de diario cualquiera de 2007

Diego acaba de llegar del trabajo.

-Diego tenemos que ir a hacer la compra.

-¿Jo Merche? ¿Otra vez?

-Sí, tenemos la nevera vacía ¿supongo que hoy querrás cenar?

Entonces Merche y Diego, se montan en el coche y se van a Alcampo.

-¿Tienes un euro para el carrito?

-Sí, toma.

Menos mal. Hoy llevaba un euro para el carrito. Pues hala, a tirar del carro por los pasillos de Alcampo, ese lugar de ilusión y fantasía donde a los inmigrantes recién llegados de los países del este los ojos les hacen chirivitas.

Después de recorrer metódicamente los pasillos y de llevar medio carro lleno llegamos a la sección de las frutas y verduras.

-Diego, tienes que coger patatas.

-Voy amada esposa.

Y... de repente... ocurrió otra vez.

Patatas para freír, patatas para guisar, patatas para cocer, patatas para tortilla, patatas gallegas, patatas del Cáucaso oriental, patatas del Tío Honorio, patatas...

¡No! ¡¡¡¡Otra vez no!!!!!

En casa solo tenemos un recipiente de cerámica de Talavera que pone patatas, solo uno, y solo pone patatas, sin especificar.

-Esposa ¿qué patatas compro?

-No sé, las más baratas.

-Las baratas tienen muy mala pinta.

-Bueno, pues mira a ver las que estén mejor.

-Estas parece que están más o menos bien.

-Pues compra esas.

Y al final compramos patatas especiales para una función concreta, patatas que serán liberadas inmediatamente de su envase en cuanto lleguemos a casa para olvidarnos si eran para freír o para hacer calceta noruega, y hacer con las patatas lo que nos dé la gana.

¿Habrá que hacer un Máster en la universidad de “Oxford” para comprar patatas?

Cursos de postgrado en la universidad de Oxford:

Máster en neurocirugía vascular podológica.

Máster en dirección de multinacionales para pijos descerebrados por la cocaína.

Máster en conducción por las calles de Madrid.

Máster en fontanería (con este te haces rico seguro)

Máster en patatología adquirida inversa.

Máster en chatarrería con especialización en basuras y escombros.

¡Qué bien! Si me gasto 10.000 euros puedo hacer un Máster en patatología para no tener nunca más que dudar a la hora de comprar patatas.

¿Por qué la vida me ha maltratado de esta forma? Las patatas son patatas y ya está, solo deberían distinguirse en grandes y pequeñas o redondas y cuadradas. ¡No quiero tener que tomar decisiones existenciales mientras hago la compra!, Y no quiero que se me vea la cara de imbécil que se me debe de quedar cuando llego a la sección de patatas. Ya está bien, ya está bien.

Me acabo de enterar que “la Leti” está embarazada, y de nuevo se abre el debate sobre la modificación de la Constitución para que Leo pueda ser reina. ¡Menuda tontería! ¿Para cuándo los debates serios sobre los problemas reales de la sociedad? Como, Por ejemplo, la normalización de las patatas.

Terminaré creando un marco previo que permita establecer las bases para tener un clima propicio que derive en la Asociación de Ciudadanos por un Único Modelo de Patatas, la ACUMP.

¿Alguien se apunta?


Yo, Diego.

THE MADRUGON (agosto 2007)

Una mañana de lunes... a las 06:45 o lo que es igual, a las siete menos cuarto de la mañana, paseaba con mi compañero y joven amigo Jaime por la zona de vuelo de la factoría EADS-CASA, para entendernos, una fábrica de aviones que hay en Getafe. Pues eso... paseábamos iniciando nuestra jornada laboral cuando empezamos a comentar algunas de las tonterías del blog, y la falta de inspiración para escribir.
Entonces me dijo... ¿Por qué no escribes sobre el madrugón?
Y es que tenía razón, ahí estábamos nosotros, entre algunos F18, C101, algún Eurofhigter y demás cacharros volantes, paseando mientras veíamos como salía el sol por detrás del Cerro de los Ángeles, mientras algunos rayos salían  entre las nubes a modo de aparición del Greco o Murillo, Alguien seguro que si quisiera podría ver a la Virgen en esa imagen, pero como uno es muy agnóstico se conforma con ver solo un bonito amanecer.


Y es que ver amanecer desde el curro en verano debería estar terminantemente prohibido por la Convención de Ginebra,  La Declaración Universal de los Derechos Humanos, La Constitución Española, los Principios Fundamentales del Movimiento, El Principio de Arquímedes y la Ley de la Gravitación Universal.


Y es que es inhumano el madrugón que hay que pegarse para pasear a las 06:45 o las siete menos cuarto de la mañana por las pistas de Getafe por muy bonito que sea el amanecer. Está claro que un horario tan europeo te deja la tarde libre para hacer otras cosas, el problema surge cuando somos europeos para aplicar el horario laboral y a la hora de irnos a la cama nos convertimos de nuevo en genuinamente ibéricos. Resumiendo nos acostamos a las tantas y nos levantamos a las 05:45 o las ... eso, ya lo sabéis.


Entonces uno va a trabajar como un alma en pena arrastrándose por la calle, conduciendo con solo un ojo abierto, deprimiéndome con  las noticias del ataque de Israel al Líbano  y poniendo después Kiss FM en la radio con el volumen por encima de lo normal para ver me despierto. Pero como mal de muchos consuelo de tontos, se me levanta un poco el ánimo cuando veo el desfile de zombis que se dirigen a ganarse el pan con el sudor de su frente a esas horas de la madrugada, y eso no es lo peor, lo peor es que tenemos que estar felices de poder ganarnos el pan con... etc. aunque para ello nos levantemos antes de que pongan las calles.


Si algún día me toca la lotería primitiva o alguna tontería de esas, tarea arduo difícil porque yo nunca juego, bueno solo en navidad. Emplearía la pasta para no volver a madrugar en mi vida. Si acaso solo para coger aviones a lugares exóticos si es que no hay uno que salga a las dos de la tarde o 14:00.


Si, ya sé que me perdería esos amaneceres, con el Sol saliendo por detrás del Cerro de los Ángeles, pero tampoco es tan preocupante, las puestas de Sol desde mi casa también son espectaculares, suerte que tiene uno.


Ya que creo que nunca me va a tocar la lotería y trabajando estoy seguro de que no me voy a hacer rico, yo ya he perdido esa esperanza, pero que ingenuo era, tendré que esperar a la jubilación, ya solo me quedan 23 años. Ese día haremos una fiesta en la que desintegraremos con mi rayo láser ultrasónico cuántico radioactivo enigmático, y es que estaremos en el año 2029, mi despertador de células integradas anaeróbicas oxidantes, que además de despertar servirá para marcar la hora y otras funciones inútiles como por ejemplo estar conectado a la red mundial de despertadores de células integradas anaeróbicas oxidantes, ya me inventaré para que sirve eso, ya que por el momento no se me ocurre nada.


Pues nada... a esperar mi fiesta de jubilación, y mientras a madrugar.


Yo Diego

Hoy toca perros (julio 2007)

Queridos todos:

Estos días previos a la primera escapada masiva de las vacaciones, me siento un poco avergonzado de pertenecer al club de los que tenemos un perro en nuestra vida.

El caso es, que durante la semana pasada, algunas campañas de propaganda me piden que no abandone a mi perro para que yo pueda irme tan tranquilo de vacaciones.

Por lo tanto voy a poner a caldo a algunos dueños de perros, yo no me considero dueño de mi perro, mi perro es mi amigo y está con nosotros porque él quiere.

Jamás he comprendido a los que son capaces de soltar a un perro en una cuneta y seguir camino de la playa tan frescos, y el caso es que eso se hace varias miles de veces cada verano, lo cual indica el elevado nivel moral y cultural de nuestro amado país llamado España. (Si alguien puede que me dé datos de otros países)

En mi caso, tengo la suerte de vivir en una zona con grandes espacios abiertos, lo que antiguamente se llamaba campo, lo que permite que mi peludo amigo pueda correr libremente cerca de casa y hacer otras cosas de perro sin molestar a nadie.

Bueno... pues me avergüenzo de ver a mis vecinos como sacan a sus perros en una zona infantil literalmente pegada al susodicho campo, y es que hay que tenerlos más grandes que el caballo de Espartero para hacer eso. Para mis lectores de fuera de Madrid, el general Espartero tiene una estatua ecuestre en la calle de Alcalá y el caballo tiene unos atributos realmente considerables. ¿Cómo es posible que suelten al perro en un sitio donde están los columpios de los niños? Es que no es uno ni dos.

No debe ser muy difícil enseñar al perro, ya que yo lo he logrado, y si no queda más remedio tengo dos bolsas con unas 100 pinzas “cogecacas” por si hubiera que usarlas en una zona urbana.

Durante los 8 años que lleva mi cuadrúpedo amigo viviendo en casa nos ha dado lealtad, amistad, compañía y seguridad, nos ha hecho recibimientos espectaculares en el aeropuerto de Barajas al regreso de algún viaje de trabajo, ya que si el viaje es de placer, se viene con nosotros, Leute ha paseado por los Campos Eliseos, la pza. Mayor de Bruselas, donde se ligó a una perrita italiana, los jardines de los palacios de Múnich, El castillo de Salzburgo, ha corrido por las playas de Normandía y los pueblos de la Bretaña francesa, ha subido a los pirineos ha estado en los castillos de Luis II de Baviera en los Alpes y... no se baña en la playa por que no le gusta. Si alguna vez y por alguna extraña razón no pudiera venir y como último recurso... se quedaría en una residencia canina, jamás seria abandonado.

La culpa de todos los impedimentos que se nos ponen a la hora de llevar a nuestros amigos a hoteles, restaurantes, etc. es nuestra y solamente nuestra, un poquito de esfuerzo en la educación y un poquito de civismo arreglarían el problema, y es que siento autentica envidia cuando veo en otras capitales europeas como el perro se sube tranquilamente en el metro y en el autobús, incluso tienen su billete. Evidentemente, y en líneas generales, nos queda mucho por aprender, pero ¿Que vamos a esperar? Si cuando nos damos cuenta de que el animalito tiene unas necesidades básicas que tenemos la obligación de cubrir, lo ponemos en la calle, ¿cómo vamos a recoger una caca?


No importa, el próximo año por estas fechas nos volverán a dar las cifras de los perros abandonados, los que se han muerto atropellados siguiendo desesperadamente el coche de sus ex – amos, y nos dará igual. Todos los lunes nos dicen las cifras de los muertos en accidentes de tráfico y también nos da igual, como para preocuparnos por los perritos abandonados. Esto es una lucha totalmente inútil. Hoy es que me ha dado por esto... perdonarme... la próxima vez escribiré sobre algo que haga más gracia.

Yo, Diego

Por si acaso no lo sabéis (Escrito durante el mundial de Alemania)

Queridos todos:

Por si acaso no lo sabéis, jo, ya titulo mis tonterías como las encíclicas, en estos días se está realizando en las llanuras del centro de Europa, un evento deportivo que acapara la atención de un importante sector de la humanidad, el otro sector se conforma con tener para comer, y esto le da igual.

Se trata del Campeonato Mundial de Fútbol.

Nuevamente, por si acaso no lo sabéis, se trata de un deporte en el que en su máximo nivel, un grupo de once niñatos millonarios con pantalones bermudas, se enfrenta a otro grupo de once niñatos millonarios con pantalones bermudas, los cuales intentan introducir un balón de cuero fabricado por niños explotados en el tercer mundo, seguro que las monjitas me llamarían comunista otra vez, en un rectángulo que mide once metros y pico por dos metros y pico, es que no se me los picos, lo siento.


Los asistentes a tan magno acontecimiento suelen tomar partido por uno de los grupos de once niñatos millonarios con pantalones bermudas, que en este caso se supone que representan a su país. En las gradas de los coliseos, dan gritos guturales, entonan cánticos patrióticos y bailan danzas guerreras. Si hubiera un Cesar en el palco, señalarían con el pulgar hacia abajo pidiendo la decapitación del árbitro, de algún juez de línea o de un defensa que acaba de cometer una falta a algún niñato del equipo de nuestros amores.

El caso es que el hecho de que el fútbol sea un deporte tan popular creo que tiene una fácil explicación. Se puede jugar en casi cualquier parte, en mitad de la calle, en un descampado, en el pasillo de casa, en la sala de espera de un hospital, en un taller mecánico, etc. Solo hace falta algo redondo y algo que sirva de portería.

Yo nunca destaqué como futbolista en aquellos grandes partidos jugados en el recreo del colegio. Hasta 7º de EGB tuve mucha suerte, ya que estaba en un colegio con dos clases por curso, y los partidos eran, 1º A contra 1º B, 2º A contra 2º B, y así sucesivamente a lo largo de los años. Mi suerte era que siempre estaba en el equipo A independientemente de mi destreza en el arte de dominar el esférico, eran partidos de treinta contra treinta, y nadie tenía en cuenta ninguna otra consideración.

Pero a partir de 7º de EGB mi suerte cambia...

Solo teníamos una clase por curso, y claro había que hacer dos equipos... los dos líderes deportivos de la case escogían su equipos, y yo siempre me quedaba el último. Lo asumí con bastante entereza... hoy seguro que me habrían llevado al psicólogo.

Solo una vez metí un gol, fue en cuarto de EGB yo tendría nueve o diez años, y recuerdo exactamente como fue. Por uno de esos milagros de la vida yo estaba solo delante de la portería, no estaba el portero, el balón, no sé como vino hacia mí, le pegue un patadón, y entro.

Yo a lo largo de mi vida he realizado acciones más o menos importantes, incluso alguna realmente heroica, si tengo tiempo ya os contaré, pero nunca, nunca, he sido aclamado como aquel día, en fin, que le vamos a hacer... y es que se ve que te puedes esforzar un güevo en tu vida... pero si no metes un gol, no eres nadie.

Voy a terminar estropeándolo, a ver si hay suerte y por lo menos pasamos de cuartos.

Besos y abrazos.

Yo, Diego


Con la Iglesia hemos topado amigo Sancho 16-jun-2006

Hola gente:

Ayer... día 15 de junio del año del señor de 2006 resulta que ocurrió un acontecimiento digno de mención, resulta que tenia reconocimiento médico.

Para celebrar tan magno acontecimiento la madre naturaleza nos obsequio con una tormenta de las que hacen historia, resultado: dos líneas de metro fuera de juego y yo tardando 2 horas en hacer 6 Km.

 Pero como uno tiene recursos para todo fui capaz de llegar a la hora a la Pza. de Castilla, donde estaban los bomberos sacando agua de los vestíbulos de la estación del metro.

Después de pasar el reconocimiento médico con las consabidas recomendaciones que en mi caso son absolutamente innecesarias, ya que ni fumo, ni bebo, ni voy con mujeres malas habiéndolas buenas, decidí ir a coger el metro de vuelta a casa a Cuatro Caminos, ya que no me había traído el bañador para poder tomarlo  en Pza. de Castilla.
Mientras caminaba por Bravo Murillo me di cuenta de un pequeño detalle. Caritas Diocesana había aprovechado mi presencia en el centro de Madrid para montar su día anual de cuestación y de esa forma intentar sacarme la pasta...  Y casi lo logran.

Después de pasar haciéndome el sueco o el búlgaro por delante de un par de mesas de cuestación donde las señoronas lavan sus conciencias una vez al año, a la altura de Francos Rodríguez me asaltan dos monjitas armadas con dos peligrosas huchas. Tras intentar la huida, la más joven, en una perfecta y ensayada maniobra envolvente me corta la escapatoria, mientras que la de mayor edad, literalmente se engancha de mi brazo...
Ya no tenía escapatoria, había sido atrapado.
En un intento desesperado... apreté un poco el paso... pero fue inútil... la monja se había enganchado y no estaba dispuesta a dejarme ir de rositas.
Empezaron con su retahíla y yo ya tenía la mano rebuscando en mi bolsillo una moneda con la que pagar mi rescate, jolin... lo más pequeño eran dos euros, en fin, han tenido suerte, se van a llevar dos euros.
En eso estábamos, cuando la mayor de las monjitas me dice que ponga algo en la hucha por caridad, en ese momento la miro y mientras ya estaba a punto de soltar los dos euros en la hucha le digo que no es caridad, si no justicia lo que debe de pedir.
En ese mismo instante, la monjita empezó a ponerse congestionada, con los ojos saliéndose de las orbitas, creo que puso la mayor cara de odio que se puede poner y... con una mezcla de voz de rata y pito me llamo: ¡Comunista!

Menos mal que aun no había soltado los dos euros dentro de la hucha, y como yo debía tener cuernos, rabo, orejas de burro, y expelía líquidos repelentes la monja se soltó sola, yo salve los dos euros y me fui a tomar un perrito caliente a la cafetería Nebraska de Cuatro Caminos (algún día escribiré sobre esos perritos calientes) tengo también que decir que la monja joven miro a la vieja con cara de ¿Pero qué coño estás haciendo?

Moraleja:
Es evidente que la iglesia católica necesita un mundo lleno de pobres y a ser posible ignorantes, en caso contrario a mi no me habrían llamado comunista. Creo que lo consideran un gran insulto, en fin... qué le vamos a hacer. Por cierto, si Médicos del Mundo, o lo que sea sin fronteras, necesitan mis dos euros que se pongan en contacto conmigo, se los daré gustoso, ya que los salvé de las garras de la Iglesia.

Hasta otro día.

Yo, Diego

Publicado el 15 de junio 2005

Hola amado pueblo:

Otra vez, otra vez ha ocurrido.

Hoy tengo que ir a parar un reconocimiento médico, a las 12, extraña hora para un reconocimiento médico, con lo que me podía quedar en la cama hasta casi las 10, pero...

Está cayendo la tormenta del fin del mundo, rayos y truenos por todas partes a las 7 de la mañana, otra vez sin poder dormir.

El caso es que no sé para qué tengo que ir al reconocimiento médico, ya que el médico no me reconoce nunca... siempre que voy me pregunta cómo me llamo ¿pero no tenia que reconocerme?

Otra vez el análisis de sangre, otra vez el estúpido cuestionario lleno de preguntas estúpidas, otra vez el electrocardiograma, la espirometría, la audiometría, la tontometría, etc. Para que dentro de 3 meses me den un sobre “confidencial” con los valores de mi colesterol y mi ácido úrico y nos pongamos a compararlos entre los compañeros JA JA JA  (risas tontas e irónicas)

Creo que cruzaré Madrid en el metro, cualquiera se mete hoy en el autobús con lo que está lloviendo, atasco asegurado, los atascos de Madrid deberían ser calificados como Histórico-artísticos, o bien de interés cultural. Todo los días las mismas personas en los mismos atascos, debe ser algún tipo de masoquismo colectivo, Sigmumd Freud (creo que se escribe así) debería haber investigado sobre esto y no de esa tontería del psicoanálisis, claro que si no lo hubiera hecho ¿de qué iban a vivir en Argentina?

Bueno lo dejaré por hoy, voy a ducharme un poco a ver si me despejo y dejo de escribir tonterías.

Un besito para ellas y un abrazo para ellos.

Yo Diego.